Desde su lanzamiento en el año 2013, el Quattroporte de sexta generación se ha confirmado como buque insignia de la gama Maserati, imponiendo nuevos estándares en términos de prestaciones, calidad y elaboración artesanal.
Este vehículo, líder de su categoría, es ahora más grande, más ligero, más lujoso y al mismo tiempo está más adaptado al uso cotidiano que el aclamado modelo que le ha precedido; además la velocidad máxima de su versión más potente le pone al mismo nivel de la mayoría de los supercar de dos puertas.
El lujo sostenible reinterpretado por el Quattroporte diesel
Pero Maserati tenía para el Quattroporte mayores ambiciones y ahora, para hacerlo más accesible a una mayor clientela, se presenta por primera vez en versión Diésel.
Pensado principalmente para el mercado europeo, el Quattroporte Diésel se une a las variantes de gasolina V6 y V8 Twin Turbo, ofreciendo además una increíble autonomía y los consumos más bajos en la historia del Quattroporte.
El motor Diésel V6 con turbocompresor de 3,0 litros garantiza unos consumos oficiales en ciclo combinado de tan sólo 6,2 litros/100 km, convirtiéndose así claramente en la versión más económica de la gama Quattroporte.
El motor Diésel completamente rediseñado para el Quattroporte, combinado con un depósito más ligero de 70 litros, asegura una autonomía de casi 1.100 km, conviertiendo al Quattroporte Diésel en una propuesta realmente interesante para los largos viajes de trabajo.
Sus emisiones de CO2 de apenas 163 gramos/km representan un nuevo record para el Quattroporte. Esto equivale a una reducción del 35% con respecto al V6 de gasolina de tracción trasera del Quattroporte, que ya mejoraba en un 20% las emisiones y consumos con respecto al modelo anterior.
El Quattroporte Diésel mantiene todas las cualidades en términos de prestaciones de un Maserati, con una aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 6,4 segundos y una velocidad máxima de 250 km/h.
Esta berlina de Maserati combina estas prestaciones con la tracción trasera y un cambio automático de ocho velocidades, una óptima distribución de pesos y un sofisticado sistema de suspensión trasera de 5 brazos.
El potente motor y su espacioso habitáculo son los elementos más relevantes del diseño del Quattroporte Diésel, dominado por un largo e imponente frontal y una parrilla cóncava con el símbolo del Tridente, haciendo clara referencia al anterior Quattroporte, al Ghibli y al GranTurismo.
El Quattroporte Diésel repropone nuevos estándares de calidad, extensivos a todo tipo de aspectos, desde el diseño, el desarrollo, o la producción, hasta los controles de procesos introducidos en el Quattroporte de gasolina.
Su producción combina la tradicional elaboración artesanal de Maserati con la utilización de tecnología de vanguardia que asegura una calidad excelente del producto gracias al cuidado de los más pequeños detalles.
Los tradicionales detalles de su elaboración artesanal se observan en el habitáculo del Quattroporte Diésel, combinados con elementos de la más alta tecnología como la pantalla Maserati Touch Control, la cámara de marcha atrás y el sistema de audio Bowers & Wilkins opcional de 15 altavoces, así como la unidad principal compatible con los más modernos móviles, para el streaming de audio y muchas otras funciones multimedia.
Con el Quattroporte original del año 1963, Maserati inventó el concepto de berlina deportiva de lujo y el nuevo Quattroporte Diésel garantiza además sostenibilidad y respeto por el medio ambiente en un paquete que continúa siendo la referencia en términos de ingeniería de alta calidad, prestaciones de supercar y confort de gran berlina.
